Reencuentro

  Por: Arturo Palet Martínez Fue una lluviosa y fría mañana de martes, la brisa sacudía los árboles mientras hacía sonar sus hojas, los salones, callados y desiertos, ya que no había ni un solo alumno en las aulas. Todos habían ido a celebrar una de las festividades más icónicas de la cultura mexicana. El tan esperado día había comenzado, el día de muertos , con esto llegaba el concurso de altares, una dinámica con los alumnos que la Universidad de Xalapa ya había celebrado esta festividad con anterioridad, ya tenía experiencia organizando un evento así. Para el principio del día las cosas eran un caos. Todo debía estar perfecto, con gente acomodando ofrendas, esparciendo la flor de cempasúchil procurando que todo quedara perfecto y listo para el concurso, todos querían ganar, se veía en sus ojos y en la forma tan vigorizada y emocionante que tenían los alumnos al preparar sus altares. El concurso se realizó en el campus 2, el cielo estaba nublado, pero ya había parado de llover, el ai

  Por Ingrid Mota Hernández Abucheos, gritos y aplausos fue lo que mas se escucho en la celebración de día de muertos en la Universidad de Xalapa luego de que se diera a conocer a los ganadores, el público estaba inconforme con el ganador, luego de que muchos altares muy bonitos no tuviera el reconocimiento que merecían.  La Universidad de Xalapa se vistió de colores y tradición para llevar a cabo la celebración de esta tradición, con  un concurso de altares de muertos, tradicionales del estado de Veracruz, los espacios contaban con una dimensión de 3X3 metros, dicho evento estuvo lleno de cempasúchil, comida típica y música de la región. También actos musicales y representaciones teatrales. Para que esto fuera posible, los alumnos de dicha institución empezaron a organizar todo  desde el día lunes 30 de octubre, se pudo apreciar cómo muchos alumnos llevaron flores, otra tanta comida y muchos otros se les vio armando arcos, alfombras y otros tantos pegando flores. El día martes 31 de o

  Por Marián Solís Domínguez La gente formada para poder apreciar el espectáculo. Llegaban cada vez más y más personas, preguntando si todavía quedaban más boletos, cuando la función ya estaba sold out . En la entrada, muy acorde a la temporada, dos catrinas con sus respectivos vestuarios y grandes sombreros recibían a los asistentes. En la puerta principal, un gran arco que rodeaba el contorno de esta misma. Diferentes adornos con flor de cempasúchil.  Al entrar a la escuela, se podía apreciar el escenario en donde se realizaría la obra de teatro. Todo el contorno adornado con bellas flores de cempasúchil hechas a mano con papel de china. Para darle una mayor calidez al ambiente, lucían hermosamente luces alrededor de toda la explanada.  Con el simple hecho de entrar se impregnaba un olor en tu nariz a la comida. Sabiendo así, que estabas en un lugar en donde se hacía presente que el día de muertos cada vez estaba más cerca. Había ricos tamales, pambazos, diversas bebidas y para qui

Por Gabriel Vásquez Llegan los últimos días del mes de octubre, y en todo el país, la gente comienza a prepararse para las celebraciones, rituales y conmemoración del Día de Muertos. Una fecha muy importante principalmente para México por el vasto significado que tiene y la tradición que es parte de la vida de muchos. Decoraciones, música, bailes, obras, desfiles, etc. forman parte de la tradición del Día de Muertos. Pero más importante que eso y lo más representativo de estas fechas, son los altares de muertos. También se les llama ofrendas y son una forma de honrar a los familiares y amigos que ya fallecieron. En los altares se colocan elementos que forman parte de la tradición. Muy importantes son las fotos de los fallecidos y a quienes se dedica la ofrenda. Se colocan diferentes tipos de comida tradicional y bebidas, que pueden ser lo que los difuntos disfrutaron en vida. También se colocan papeles picados, flores de cempasúchil, y pan de muerto que es tradicional de estas fechas.

  El brillo de tradición: El concurso de altares en la Universidad de Xalapa Por: Valeria Suárez Lara En una fría mañana de octubre, el campus universitario se preparaba para tener uno de los eventos más esperados del año: el concurso de altares del Día de Muertos . La tradición de celebrar esta festividad mexicana , que honra a los seres queridos que han partido y que tiene cada altar una temática, se había llegado la hora en la comunidad estudiantil de la Universidad de Xalapa. Desde hace años, esta institución educativa había abrazado la oportunidad de fomentar la cultura y las tradiciones mexicanas, y el concurso de altares era la prueba viviente de este compromiso. Cada año, los alumnos se esmeran en la creación de altares únicos y creativos que honran a sus seres queridos fallecidos. La competencia no se centra solo en la estética sino también en la profundidad y el significado de cada altar. El día 31 de octubre, el campus se llenó de vida y color. El sol no salía en el cielo az